Evangelina cumplió este año 88 años, es de mi tierra de Galicia y de Valdoviño. Evangelina nos ofrece en papel lo que lleva toda la vida recitando, pues a través de la poesía nos cuenta los problemas de Galicia y su gente: habla de la emigración, la droga y pone incluso la música en cada verso; no se olvida de los que juegan con los bienes ajenos... Evangelina se moja, no se deja nada en el tintero...
He dicho que nos ofrece ahora en papel lo que lleva toda la vida diciendo, y es que es especial hasta en eso:
Evangelina y varios vecinos se reunían en la marquesina del autobús y en ella se hablaba y se decía de todo: sin censura.
Los vecinos cantaban sus poemas sin derechos de autor, porque la poesía pertenece al pueblo.
Algunos de esos compañeros de tertulia ya no están, así que este poemario es también un homenaje al paso del tiempo, un legado...
Este poemario es un reflejo del espíritu de A Frouxeira, de su gente, y de Evangelina, que puede con todo y más. Las nuevas generaciones tenemos mucho que aprender de personas como ella, como bien dice su prólogo: yo de mayor quiero ser como ella.
Recomiendo la lectura de estos poemas por todo lo que he dicho pero sobre todo por lo que me hizo sentir: sentí la fortaleza del mar, que como la vida, sube, baja, golpea fuerte y también cura.
Os invito a su lectura, dejad que los versos os golpeen como el mar, como la vida, dejad fluir...
Recomiendo la lectura de estos poemas por todo lo que he dicho pero sobre todo por lo que me hizo sentir: sentí la fortaleza del mar, que como la vida, sube, baja, golpea fuerte y también cura.
Os invito a su lectura, dejad que los versos os golpeen como el mar, como la vida, dejad fluir...
Como he dicho, a veces las palabras no llegan, así que para terminar os dejo este vídeo de Evangelina recitando, o lo que es lo mismo, Evangelina en estado puro. Olvidad todo lo que os he dicho, y escuchad:
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