martes, 23 de noviembre de 2021

Presentación ¡Que bello será vivir sin cultura! con César Antonio Molina en el Cine París de A Coruña.


El lúcido ensayo ¡Qué bello será vivir sin cultura!, del escritor y exministro de cultura César Antonio Molina, se presentaba en el cine París de A Coruña el pasado 19 de octubre. Moderaban el evento el editor y periodista Xose Luis Canido y José Luis Méndez Romeu, exvicepresidente da Xunta de Galicia y exconcejal de Cultura del Ayuntamiento de A Coruña. Fue la primera presentación literaria presencial desde la pandemia y no pudo ser más motivadora.

Se habló de la larga trayectoria de César Antonio Molina como escritor, su fructífera carrera como poeta, su trabajo como exministro y de los años en los que fue director del Instituto Cervantes. En definitiva, se habló de su compromiso con la literatura a varios niveles. No solo para divulgarla, sino para provocar el «despertar» a los lectores. Precisamente ese despertar lo puede generar su ensayo ¡Qué bello será vivir sin cultura! El título que reza ya le indica al lector que se va a encontrar con un abanico amplio de la cultura en sus páginas. ¡Qué bello sería vivir sin cultura! es un brillante ensayo sobre cómo la transformación de nuestros hábitos culturales influye en nuestra capacidad para ser críticos.

¿Qué contaron los presentadores sobre el libro?

Xosé Luis Canido decía que este trabajo de Molina es «un libro de viajes en distintos sentidos, ya que contempla viajes «físicos» y también de otro tipo, pues hace un recorrido «a través de las ideas que han marcado el siglo XX”».

Por otro lado, Méndez Romeu resaltaba que esta obra de Molina «pasa revista a más de un centenar de los ensayistas más importantes del último siglo».

La literatura no es solo puro entretenimiento, la buena literatura sirve para advertir, y es que César Antonio Molina, siguiendo la estela de los ensayistas y filósofos que desfilan por el libro, como Umberto Eco o George Steiner, nos advierte sobre la deriva que puede tomar el uso poco adecuado y abusivo de la tecnología. La tecnología ha cambiado nuestra vida por completo. Es importante consultar estos libros si queremos reflexionar y replantearnos cómo queremos seguir esta trayectoria tecnológica. ¿Nos vamos a dejar dominar o queremos la libertad?

Comentaba Molina una anécdota escalofriante que vivió como profesor: una alumna gritaba orgullosa: «¡Soy mediocre!». Hemos llegado a un punto en que está de moda ser mediocre, ser ignorante. En la época que más medios de información tenemos el alcance, hay personas orgullosas de su incultura. No hay peor ignorante que el que quiere serlo. Es un síntoma alarmante del estado de la sociedad en que vivimos.

Quiero hacer una mención especial a Chema Paz Gago, a quien después de entrevistar de forma virtual por el gran trabajo que hizo rescatando la novela inédita de Emilia Pardo Bazán, pude ponerle cara. Gracias a él pude además hablar breves instantes con César Antonio Molina. De esa pequeña conversación, saqué en claro varias cosas: primero, que para que esta era tecnológica se convierta en un progreso real tiene que hacerse con tino, con sentido y dentro de un marco legal. Otro de los temas que hablé con César Antonio fue el de la saturación de información a la que estamos sometidos. Me decía que para distinguir la información real entre tanta paja es imprescindible el papel de la cultura y la literatura, pues nos ayuda a formarnos el suficiente criterio como para que no nos dejemos engañar. Me quedé con ganas de unas recomendaciones literarias, pero no era el momento, los compromisos a veces no dejan tanto tiempo como nos gustaría a los lectores. Y, aunque a lo malo siempre hay quien gane, cree que todavía queda esperanza.

Libros como este creo que son necesarios para no perder esa esperanza y ayudar a los lectores a no perderse en la nada. En la era de «si no estás en una red social no existes», César Antonio Molina continúa su gran labor sin estar prácticamente en ellas, y con el evento casi lleno. Que no os engañen. La cultura es la clave.

Libros como este creo que son necesarios para no perder esa esperanza y ayudar a los lectores a no perderse en la nada. En la era de «si no estás en una red social no existes», César Antonio Molina continúa su gran labor sin estar prácticamente en ellas, y con el evento casi lleno. Que no os engañen. La cultura es la clave.


César Antonio Molina (A Coruña). Licenciado en Derecho y en Ciencias de la Información. Doctor en Literatura. Fue profesor de Teoría y Crítica Literaria en la Universidad Complutense y de Humanidades en la Carlos III. Director adjunto de Diario 16, dirigió el Círculo de Bellas Artes, el Instituto Cervantes, Casa del Lector y fue ministro de Cultura. Ha publicado los libros Vivir sin ser vistoRegresar a donde no estuvimos, y en Destino, Esperando a los años que no vuelven, Lugares donde se calma el dolorDonde la eternidad envejeceTodo se arregla caminandoFuga del amorLa caza de los intelectuales Tan poderoso como el amor. Premiado nacional e internacionalmente, tiene las más altas condecoraciones de España, Francia, Italia, Portugal, Serbia y Chile, así como la medalla Castelao de Galicia.














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lunes, 8 de noviembre de 2021

Arde este libro de Fernando Marías



Dice Fernando Marías que Arde este libro es la respuesta a esta llamada que se corresponde con el inicio del libro: «Te incineraron con una novela mía entre las manos. Por eso escribo este libro. Hasta ese momento jamás pensé que contaría nuestra historia. Había logrado asumir el largo camino de tu final, que a veces, no sé si atreverme a decirlo, tanto deseaba que llegara, y describir aquel calvario que por encima de todo fue tuyo me habría parecido una herejía. Pero entonces supe que te incineraron con la novela entre las manos y ahí, sin retorno ni piedad, nació este libro. Yo rememorando y tú muerta. Jamás podríamos habernos figurado el día del primer abrazo que desembocaríamos tanto después en este diálogo».

No volveremos a Manderley en esta ocasión, pero nos alojaremos en el hotel Malasaña, donde las fechas que obsesionan a Fernando Marías nos llevan, no a la Señora de Winter, sino a quien fue su pareja durante años, Verónica, y que ahora está muerta.

Como en la novela de Daphne Du Maurier, Verónica está presente en todo momento durante el libro a través de la mirada del propio autor. Él mismo explica que quiso hacerlo así para ser lo más fiel posible a la verdad. Conoceremos también un poco más de Verónica a través del recuerdo de su madre. Además, sus escritos sobre su última época facilitaron al autor escribir este libro.

El Madrid de los 80 es otro de los fantasmas de esta novela. La movida fue un movimiento cultural en toda regla, aunque muchos lo intenten negar a día de hoy, guste más o guste menos, Fernando Marías fue testigo y partícipe de ella. No es un libro sobre la movida, pero la historia de amor y desarraigo de Fernando Marías y Verónica ocurre durante la movida y queda constancia de lo que vivió.

En este libro de duelo, Fernando Marías nos advierte sobre el daño que hace el alcohol en la persona adicta y en su entorno, también del tabú y el estigma que supone. Cuenta Fernando Marías cómo reacciona la gente cuando le cuenta que fue alcohólico. Clara evidencia de lo que queda por hacer respecto a la salud mental en esta sociedad. Es una advertencia y una indagación sobre el porqué alguien cae en ese camino de autodestrucción.

Fernando Marías extirpa el sentimiento de culpa en este libro: «Te mató el alcohol y fui yo quien te enseñó a beber. Doce palabras enterradas durante lustros». Dice el autor en una entrevista en Página dos que no puede hablar de sanación por escribir este libro, pero que por lo menos lo ha intentado y cree que ha cerrado un ciclo. Por experiencia, poder escribir el libro y hablar sobre ello es un gran avance. Todo se vuelve más real cuando se escribe. Como digo en ocasiones, la literatura no soluciona, pero ayuda. Prueba de ello son las palabras del propio autor. Seguro que, como mínimo, tal y como lo ha escrito, lo ha ayudado a vivir con el recuerdo de Verónica, que no es poco.

Arde este libro cumple una función catártica no solo para el autor, pues puede servir a los lectores que estén pasando por un duelo, o que tengan un problema de adicción y vean las dos caras de la moneda. También atrapa al lector por su calidad literaria. Hoy en día se lleva mucho publicar memorias en las que importa más el significado anecdótico que la calidad literaria, pero Fernando Marías otorga un gran equilibro a sus memorias noveladas en ese aspecto.

No es una novela para todo el mundo o, mejor dicho, no para cualquier momento, pero la recomiendo mucho. Es uno de los libros más honestos, desgarradores y, a su vez, luminosos que he leído.




Fernando Marías (Bilbao, 1958) es novelista, editor e inventor de conceptos culturales.Autor de novelas como La luz prodigiosa, El Niño de los coroneles, La mujer de las alas grises o Todo el amor y casi toda la muerte. En 2015 recibió el Premio Biblioteca Breve con La isla del padre. Entre sus novelas dirigidas al público juvenil destacan Cielo abajo (Premio Anaya 2005 y Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil 2006), Zara y el librero de Bagdad (Premio Gran Angular 2008) y El silencio se mueve.

De su obra, se ha llevado al cine La luz prodigiosa (adaptada por él mismo y dirigida por Miguel Hermoso en 2002 y ganadora de numerosos premios internacionales) e Invasor (Daniel Calparsoro, 2012).

Fernando Marías es también el creador, editor e impulsor del proyecto de literatura fantástica Hijos de Mary Shelley, plataforma de la que surgen literatura, música, performances y monólogos teatrales.